Yolanda Díaz ha sido por primera vez en mucho tiempo contundente sobre la unidad de la izquierda de cara a unas próximas elecciones. Apuesta por una alianza global de las distintas formaciones del país como sucedió en las elecciones generales del 23 de julio de 2023 e interpela a Podemos, quien rompió con Sumar meses después, para participar en esa candidatura conjunta: «Quien no quiera estar ahí, lo tiene que explicar».
Es habitual que la pregunta sobre la unidad de la izquierda se responda con evasivas, con generalidades o señalando que todavía no se está en un escenario con elecciones a la vista. Sin embargo, la vicepresidenta segunda y líder de Sumar ha dado un importante paso al señalar esa unidad como un objetivo por el que trabajará y como una necesidad en estos tiempos.
«Hay que volver a hacer lo que hicimos el 23 de julio», ha sentenciado en un desayuno informativo organizado por Europa Press. Se refiere a la candidatura conjunta de una quincena de partidos que fructificó en Sumar, que estaba liderada por el nuevo partido de Díaz (Movimiento Sumar) y junto a partidos destacados como Podemos, Izquierda Unida (IU), Comunes, Compromís, Más Madrid, Verdes Equo, Chunta Aragonesista o Més. Todos estos salvo la formación morada caminan todavía de la mano en el Congreso, no sin tensiones, pero la escisión de Podemos ha desatado una batalla feroz en la izquierda dejando un espacio roto en lo político y enfrentado en lo electoral. Como ya ha pasado en los comicios europeos y en los de algunas comunidades autónomas.
«Uno, en los momentos históricos, tiene que decidir de qué lado está. Y no hay ninguna circunstancia que pueda justificar no caminar juntas», ha enfatizado Díaz. Luego ha recalcado que, además, los proyectos políticos que se sientan a negociar esa unidad discuten sólo de «matices», pues comparten en gran medida proyectos e ideas, aunque unos puedan poner más el foco en el feminismo, el ecologismo u otros asuntos.
Díaz se situado como una más en la tarea de reconstruir la unidad. «Yo voy a trabajar como lo está haciendo todo el espacio para lo que ha pasado el 23 de julio vuelva a pasar y quien no quiera estar ahí, lo tiene que explicar», ha señalado. Un mensaje a Podemos.
La líder de Sumar, a la que Ione Belarra e Irene Montero culpan de la fractura en el espacio y a la que ataca recurrentemente, ha hecho hincapié en la amenaza del contexto internacional de derechización de la política y en los efectos perversos de la Ley Electoral ante una división de listas para alertar de la relevancia de reeditar la unidad y conseguir una candidatura conjunta.
En cuanto al contexto. «¿Ustedes ven lo que está pasando en el mundo? No es ninguna broma. No es una revolución sólo retórica. No son los disparates de Trump. Es un proyecto cultural y económico iliberal que tiene como objetivo destrozar la vida de la gente. ¿Se imaginan un país en el que Abascal sea vicepresidente y a Feijóo?», ha expuesto la vicepresidenta segunda a los presentes en el desayuno informativo.
Luego, tras pedir la unidad y apelar a Podemos, ha ahondado en los «efectos distorsionadores» de una división del espacio en varias candidaturas, por ser la Ley Electoral una norma que fija la provincia como circunscripción electoral. «Son brutales», ha avisado.
«Piense lo que piense uno y una, que es muy legítimo, hay que llegar a un acuerdo. Después cada uno que tenga las estrategias y matices que quieran», ha incidido Díaz.
Luego ha rematado loando que la «diversidad» no hace más que «enriquecer» y destacando que la política es «demasiado importante para la vida de la gente» como para no tener todo esto en cuenta.
La pregunta es el cómo
Hace tiempo que las intenciones y las buenas palabras sobre la unidad de la izquierda recorren los distintos partidos políticos pero la pregunta clave está en el cómo se consigue. No es tanto una cuestión de programa sino de reparto de cuotas de poder en la toma de decisiones y los huecos en las listas electorales.
Una parte del enfrentamiento actual en la izquierda alternativa al PSOE tuvo que ver con la construcción de Sumar y la negativa a hacer unas primarias para repartir los puestos de las listas al Congreso. Lo que dejó fuera a referentes de Podemos como Irene Montero o Pablo Echenique, que querían repetir.
De cara al congreso que Movimiento Sumar celebrará a finales de marzo, el partido de Díaz da algunas pistas de cómo transitar ese camino en los diferentes documento político y organizativo.
La dirección actual hace una firme defensa de las alianzas para las elecciones. «Movimiento Sumar desarrollará todas las iniciativas necesarias para intentar conseguir alianzas que favorezcan la obtención de resultados electorales favorables, la reedición de gobiernos progresistas y el reforzamiento de derechos y de bienestar de la vida de la gente», se dice.
Para esos procesos de «confluencia y unidad», Movimiento Sumar da algún detalle. Primero, que deben hacerse sin «a prioris». Segundo, «promoverá que estos procesos se aborden con sistemas de primarias, con reglas inclusivas y abiertas a la sociedad civil».