Paloma H. Matellano Madrid
Actualizado
Vox cree que el traspaso del palacete de París al PNV aún puede revertirse y, como ya ha hecho antes con tantos otros temas, el partido ha optado por trasladar esta reivindicación de la esfera política a la judicial. Los servicios jurídicos de la formación de Santiago Abascal van a presentar una querella contra el Consejo de Ministros por este motivo, acusando al gabinete de Pedro Sánchez de prevaricación y malversación.
La entrega del palacete de París formaba parte del decreto ómnibus que el Congreso derogó el pasado miércoles con los noes de PP, Vox y Junts. Los dos primeros partidos, precisamente, señalaron esta cesión al PNV como uno de los principales motivos que desencadenaron su negativa a aprobar un texto que también incluía la revalorización de las pensiones y la prórroga de las ayudas al transporte público, entre otras medidas.
Sin embargo, que el Congreso rechazara el decreto que autorizaba el traspaso del inmueble no impidió que el PNV, previamente, ya hubiera registrado a su nombre el palacete. Los nacionalistas se acogían a que la transferencia de la titularidad del edificio se circunscribía a la «entrada en vigor» del decreto, no a su convalidación, y que por tanto esto no cambiaba después de que la Cámara derogara el texto.
El texto del real decreto-ley que rechazó el Congreso el miércoles así lo recogía: «Con efectos desde la entrada en vigor de este real decreto-ley, la propiedad del inmueble de titularidad de la Administración General del Estado sito en París […] quedará atribuida al PNV en atención a la vinculación histórica del edificio con este partido».
Sin embargo Vox, aunque lamenta que «el delito ya se ha consumado», aduce que «dada la no convalidación del decreto, el Estado debe proceder a la inmediata recuperación de este inmueble», antigua sede del Gobierno vasco en el exilio y que actualmente acoge instalaciones del Instituto Cervantes. Así, el partido con sede en la calle Bambú insiste en que el Ejecutivo debe recuperar la propiedad de este edificio o, de lo contrario, avisa de que habrá «consecuencias».
Según ha trasladado este lunes en rueda de prensa José Antonio Fúster, portavoz nacional de Vox, a la querella que registrarán por este asunto se sumarán varios «requerimientos a organismos». Fuentes del partido apuntan que en los próximos días presentarán estos requerimientos dirigidos a la Dirección General de Patrimonio y al propio PNV.
En palabras del portavoz, el traspaso del palacete parisino al PNV representa la «última corruptela» que ha tratado de «cometer a plena luz del día» el Gobierno, «colando en un real decreto trampa» esta cláusula que responde a una reivindicación histórica de los jeltzales. «Un regalo millonario», según lo ha definido.