Caracas (EFE).- Venezuela acusó este sábado al Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que cumple 19 años de creado, de «alinearse con los intereses» de Estados Unidos, por lo que hizo un llamado a «recuperar este espacio» para que sea «verdaderamente inclusivo y transparente».
En un mensaje publicado en Telegram, el titular de Exteriores, Yván Gil, dijo que, el 15 de marzo de 2006, la Asamblea General de la ONU dio «un paso significativo» al crear el Consejo de DD.HH. con el fin, señaló, de «reemplazar la anterior Comisión de Derechos Humanos, que había sido criticada por su falta de efectividad y por permitir la participación de Estados con historiales cuestionables».
«Hoy, el CDH (Consejo de Derechos Humanos) vuelve a enfrentar los mismos retos de su predecesora, al alinearse con los intereses de Washington», aseguró Gil.
Los reparos de Venezuela frente a misión de la ONU
Una de las principales tareas del Consejo, formado por 47 Estados miembros (el resto participan también como observadores) con mandatos de tres años, es crear y renovar las diversas comisiones de investigación de la ONU sobre violaciones de derechos humanos, como la que recientemente aprobó para estudiar posibles abusos en el actual conflicto en la República Democrática del Congo.
En octubre del año pasado, la Administración de Nicolás Maduro rechazó la prórroga por dos años del trabajo de la Misión internacional independiente de determinación de los hechos de la ONU, aprobada en una sesión del Consejo de DD.HH.
Entonces, Venezuela expresó que esa misión, creada en 2019, es «una muestra clara del extravío de las instituciones del Sistema de Naciones Unidas, que se han convertido en instrumentos de coerción y chantaje a los pueblos y Gobiernos soberanos».
Previamente, la misión había denunciado que el Estado venezolano aplicaba «la modalidad más dura y violenta de su maquinaria de represión», en un contexto de crisis desatada tras las presidenciales de julio de 2024, en las que Maduro fue proclamado ganador por el organismo electoral -controlado por rectores afines al chavismo-, lo que la oposición mayoritaria denunció como «fraude».
