Telefónica ha puesto punto final a su presencia en Perú tras tres décadas en el país andino. La compañía de telecomunicaciones ha vendido la totalidad de su participación en Telefónica del Perú (TdP) a la firma argentina Integra Tec International por unos 3,7 millones de soles peruanos, equivalentes a unos 900.000 euros al tipo de cambio actual, según ha informado a última hora de este domingo a la Comisión Nacional del Mercado de Valores en un hecho relevante. La cifra es prácticamente simbólica, ya que la operación incluye la asunción de una deuda superior a los 1.200 millones de euros. De hecho, la multinacional española ha admitido que “el precio se ha determinado considerando la situación de Telefónica del Perú y el contexto del acuerdo alcanzado”.
La filial peruana atravesaba una profunda crisis financiera y, en febrero, solicitó voluntariamente acogerse a un procedimiento concursal, el cual continúa en trámite y está pendiente de aprobación por Indecopi, el organismo estatal que supervisa los procesos de insolvencia y competencia en Perú. Se trata de la tercera desinversión que realiza la multinacional española en el subcontinente latinoamericano recientemente, tras la venta de las filiales argentina a Telecom por 1.200 millones de euros, y de la colombiana a Millicom por 367 millones.
Según ha informado Telefónica a la CNMV, por esta operación Integra Tec International ha adquirido el 99,3% de las acciones de Telefónica del Perú. Para hacerse con el 0,7% restante, en manos de accionistas minoritarios, la firma se ha comprometido a lanzar una oferta pública de adquisición (OPA) con el objetivo de alcanzar el 100% del capital social. Además, la operación incluye que Telefónica Hispam ha vendido a Integra los créditos financieros concedidos a Telefónica del Perú.
La operadora española, al igual que sucediera en la venta de su filial argentina, se ha asegurado el cierre y el cobro de la venta de su subsidiaria aprovechando la legislación del país. Es decir, que si el Gobierno peruano o los reguladores pusieran alguna traba a la operación, las condiciones que impusieran a la venta recaerían en el comprador.
Asimismo, ambas partes han acordado mantener a disposición de Telefónica del Perú el importe total no dispuesto del crédito de 1.549 millones de soles (en torno a 370 millones de euros)que le fue concedido por la matriz, Telefónica Hispam, cuando se solicitó el concurso de acreedores con el fin de mantener la operativa de la empresa y el pago a empleados y proveedores. No obstante, los desembolsos del importe restante serán realizados en parte por Telefónica Hispam y en parte por Integra Tec, según ha destacado la filial peruana de Telefónica en un comunicado.
Telefónica ha afirmado que esta desinversión se enmarca dentro de su estrategia de reducción progresiva de exposición en Hispanoamérica, una región donde la compañía ha enfrentado en los últimos años importantes desafíos regulatorios, económicos y operativos.
Proceso de transición
Por su parte, Integra ha indicado que, además de asumir la cartera de 13 millones de usuarios, sus objetivos principales incluyen el mantenimiento y la ampliación de los servicios de telecomunicaciones, la reestructuración de la deuda de TdP y la implementación de un plan de negocio. Según el comunicado, la empresa “buscará establecer un diálogo constructivo con todas las partes involucradas, incluyendo el Gobierno y los acreedores, para asegurar que la transición sea lo más fluida posible”.
Como parte de la transición, Germán Ranftl ha sido designado como el nuevo presidente del directorio de Telefónica del Perú. Ranftl, director financiero de Edenor, la principal distribuidora de energía eléctrica argentina, tendrá la responsabilidad de liderar el proceso de reestructuración financiera de la compañía, en el marco del Proceso Concursal Ordinario de Reestructuración (PCO-R) iniciado ante el Indecopi. Este proceso continuará su curso conforme a la normativa vigente, con el objetivo de estabilizar la situación económica de la empresa.
No obstante, los nuevos dueños han informado que para garantizar la estabilidad operativa durante esta transición, el equipo directivo actual de TdP, liderado por Elena Maestre, continuará en sus funciones. “Este enfoque busca preservar la continuidad en la prestación de servicios y fortalecer la confianza de los usuarios, proveedores y demás partes interesadas”, ha señalado.
Integra Tec, ha destacado su experiencia en América Latina en sectores como telecomunicaciones, servicios públicos, medios, energía, química y recursos naturales. Además, cuenta con un historial en la recuperación de empresas en dificultades financieras.
Concurso de acreedores
Telefónica del Perú decidió solicitar voluntariamente el pasado 14 de febrero el concurso de acreedores para responder a la crisis financiera que afecta al negocio en el país andino, y a los pleitos fiscales que arrastra desde hace dos décadas por más de 1.000 millones de euros debido a sus controversias con la Superintendencia Nacional de Aduanas y de Administración Tributaria (Sunat) en el país. Paralelamente a la declaración de concurso, y por ese mismo pleito fiscal Telefónica ha llevado el caso al Centro Internacional de Arreglo de Disputas de Inversión (Ciadi), organismo dependiente del Banco Mundial.
La filial registró unas pérdidas netas de 3.391,59 millones de soles peruanos (872 millones de euros al cambio actual) en 2024, lo que supone multiplicar por 5,5 veces los números rojos del año anterior, y facturó 6.020 millones de soles (1.548,5 millones de euros), un 7% menos. Al cierre de 2024, la deuda de Telefónica Perú ascendía a 4.838 millones de soles, que equivalen a unos 1.241 millones de euros. El mayor acreedor es la Sunat, con 2.473 millones de soles, unos 634,5 millones de euros. En segundo lugar, figuran los tenedores de bonos emitidos por la compañía, en un volumen total de 2.365 millones de soles, unos 606,3 millones de euros.
Telefónica Perú anunció que, una vez aprobada la solicitud de concurso por el Indecopi, convocaría la Junta de Acreedores para presentarles un plan de reestructuración de la deuda. Este organismo, donde estarán representados todos los acreedores encabezados por la Hacienda peruana y los bonistas, es el que debe decidir si acepta la propuesta de la empresa, la rechaza o presenta un plan alternativo. No obstante, será ahora Integra la encargada de negociar con los acreedores.