«Yo mismo me he planteado abandonar las redes sociales», ha desvelado ante la principal sala del Foro Económico Mundial, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en uno de sus discursos con los que ha buscado más impacto internacional de su carrera.
El líder del PSOE se ha querido convertir en un abanderado contra los «tecnobillonarios» y ha propuesto medidas relevantes sobre las pujantes redes sociales que, en su opinión, «envenenan» la convivencia. Por tanto, ha asegurado que va a proponer en el Consejo Europeo acabar con «el anonimato en las redes sociales» y hacer que magnates como Elon Musk, al que no ha citado expresamente por su nombre, sean «responsables» judicialmente si, llegado el caso, se demuestra que ha habido en sus plataformas comportamientos delictivos. También plantea transparencia en los algoritmos utilizados en estas plataformas.
Según Sánchez, si algún usuario de red social quiere usar nombres falsos, debe quedar registrado con una identidad, para que, en caso de conducta irregular, puede ser identificado y obligado a rendir cuentas. El líder socialista ha asegurado que estas plataformas «erosionan la democracia» y que es una realidad que «ya no podemos ignorar».
El presidente ha centrado su discurso en este capítulo y ha evitado atacar, en cambio, al nuevo presidente de EEUU, Donald Trump. Se ha limitado a señalar que hay que evitar «guerras comerciales que no benefician a nadie».
