Denuncian un «castigo colectivo» que «exacerba la catástrofe humanitaria» en la Franja tras la ofensiva militar israelí
MADRID, 13 Mar. (EUROPA PRESS) –
Las autoridades de la Franja de Gaza, controladas por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), han denunciado este jueves el cierre de «decenas de panaderías» y la «parálisis del sector del transporte» a causa del bloqueo de Israel a la entrada de ayuda al enclave, hecho que ha descrito como «una estrangulación colectiva».
El portavoz de la oficina de prensa de las autoridades gazatíes, Ismail al Zauabta, ha recalcado que estas acciones por parte de Israel «exacerban la catástrofe humanitaria» en la Franja y suponen «una violación flagrante de todas las normas y leyes humanitarias internacionales» al ser «un castigo colectivo» a la población del enclave.
«El cierre ha bloqueado la entrada de combustible y gas para cocina, causando que decenas de panaderías hayan cesado operaciones, amenazando la seguridad alimentaria de más de 2,4 millones de palestinos que sufren ya unas duras condiciones de vida por la guerra, sus repercusiones y el cerco», ha dicho.
Así, ha reseñado que «evitar la entrada de bienes esenciales, en medio del deterioro de la situación humanitaria, equivale a una estrangulación colectiva llevada a cabo por las fuerzas de ocupación con premeditación y alevosía», algo que «afecta a las vidas de personas inocentes».
«La política de cierre sistemático y la prohibición de importación de combustible no sólo ha cerrado panaderías e instituciones vitales, sino que ha paralizado completamente el sector de transportes, afectando el movimiento de ciudadanos y limitando sus posibilidades de llegar a hospitales y centros médicos», ha sostenido.
Al Zauabta ha aseverado que «el duro bloqueo no deja espacio para una vida normal en Gaza, convertida en una enorme prisión», si bien ha manifestado que Israel «nunca tendrá éxito a la hora de romper la determinación del firme pueblo palestino». «Sus conspiraciones sólo hace los palestinos están más decididos a lograr sus derechos legítimos», ha agregado.
Por último, ha reclamado a la comunidad internacional que «actúen inmediatamente para presionar a la ocupación israelí» de cara a la reapertura de pasos fronterizos. «Todo el mundo debe asumir su responsabilidad moral, humanitaria y legal ante estos crímenes», ha señalado, al tiempo que ha dicho que la situación podría derivar «en una catástrofe humanitaria sin precedentes que sea una mancha en la frente del mundo».