MADRID 3 Abr. (EUROPA PRESS) –
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han confirmado este jueves que más de 250 miembros del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), incluida una docena de altos cargos, han muerto víctimas de los ataques israelíes desde que el Ejército decidió reanudar la ofensiva contra la Franja de Gaza a comienzos de marzo.
Según ha precisado el portavoz en árabe del Ejército israelí, Avichai Adrai, las fuerzas israelíes han llevado a cabo ataques contra unas 600 infraestructuras vinculadas a Hamás, y ha matado a decenas de terroristas que participaron en la ofensiva palestina del 7 de octubre de 2023, detonante de la actual guerra regional.
«En los últimos días, hemos pasado a una nueva fase de la Operación Orgullo y Espada, al servicio de los objetivos de devolver a los soldados secuestrados y destruir las capacidades militares y gubernamentales de Hamás», ha manifestado Adrai, que aboga por mantener la «ambiguedad operativa» para sorprender a Hamás.
Hamás lanzó el 7 de octubre de 2023 una ofensiva sin precedentes contra territorio israelí, dejando un balance de más de 1.200 muertos y 240 rehenes. El Ejército de Israel respondió con una cruenta ofensiva militar que hasta la fecha deja más de 50.500 palestinos muertos, en su mayoría civiles aunque también miles de terroristas.
Las partes alcanzaron en enero un acuerdo de alto el fuego que tras apenas unas semanas –que sí sirvieron para el intercambio de 33 rehenes por cientos de presos palestinos– saltó por los aires con la reanudación de los ataques por parte de Israel, que acusa a Hamás de no estar comprometido con lo pactado.
Desde entonces se han sucedido los ataques de Israel sobre la Franja de Gaza y, según las autoridades locales, controladas por Hamás, el balance de víctimas mortales supera ya los 1.250 muertos y 2.700 heridos. Según el balance confirmado por Adrai, menos de una cuarta parte de los muertos serían miembros de Hamás.
