Buscar

En Cuba, el país del béisbol, el fútbol mete cada vez más goles

En Cuba, el país del béisbol, el fútbol mete cada vez más goles

Por Juan Carlos Espinosa |

La Habana (EFE).- Cerca del cuarto ‘inning’ en el mítico Estadio Latinoamericano de La Habana, un grupo de jóvenes cubanos abandona sus butacas. «Ya va a empezar el partido del Barça», dice en voz alta uno de ellos.

A un costado, Ramón Barrera, de 70, se acomoda en medio de una fila vacía. El amor por el béisbol, deporte nacional y símbolo cultural de la isla, lo heredó de su padre, quien lo llevaba de niño al campo.

Sin embargo, tampoco es ajeno a la preferencia por el fútbol. Si Industriales, el equipo de la capital, disputase la final y el Real Madrid jugase, a la misma hora, la final de la Liga de Campeones, ¿Cuál partido vería? «El Real Madrid. Ahí sí no me la pierdo», contesta Barrera.

Poco a poco, el béisbol ha perdido terreno entre los cubanos. El cambio ha sido aupado, en la última década, por las transmisiones de los partidos del Real Madrid y el Barcelona en la televisión estatal.

Esta nueva afición se percibe en las calles: guaguas con bufandas de alguno de los dos equipos; jóvenes con camisetas de clubes europeos; niños en las calles pateando pelotas en vez de bateando… y estadios de béisbol vacíos.

En un descampado cerca de la Quinta Avenida, Eric, de 14 años, y Ernesto, de 16, dominan descalzos el balón.

«Yo creo que a casi todos mis amigos les gusta más el fútbol, al menos de mi aula, sí», le dice Eric a EFE. Ernesto lo complementa: «Para jugar pelota (béisbol) tienes que buscar muchas cosas: la ropa, el guante, la bola, el bate… Y para el fútbol lo único que te hace falta es una bola y ya».

Alejandro Rodríguez, periodista deportivo en la televisión cubana, asegura a EFE que desconoce si existen estudios de audiencia que puedan confirmar el sorpaso. Sin embargo, considera que el cambio «es obvio», aunque con matices.

Fotografía del 27 de marzo de 2025 de un joven con los pies descalzos jugando fútbol en un parque, en La Habana (Cuba). EFE/ Ernesto Mastrascusa

«Tienes que separarlo por sectores y generaciones. Por ejemplo, el número es mucho más alto a favor del fútbol en los jóvenes, dígase menores de 35 años. De ahí para arriba todavía los números pueden estar a favor del béisbol. No hay un estudio que yo conozca, pero estoy casi seguro que, al menos, en esas edades es más parejo. Creo que el fenómeno es diferente en la capital con respecto a las provincias», subraya.

La pérdida de fuelle del béisbol no es un asunto menor en Cuba. El rey de los deportes se introdujo, según los historiadores, sobre 1860, a través de isleños que estudiaban en Estados Unidos y de marineros norteamericanos.

La pelota, declarada Patrimonio Cultural de la Nación en 2021, se convirtió en un símbolo antiimperialista español –algo que también sucedió en otras colonias del Caribe– durante las guerras de independencia. Y, de hecho, la Capitanía General de la época la prohibió por considerarla «un juego antiespañol y de tendencias insurreccionales».

Los cubanos han sido estrellas mundiales desde entonces y, en la actualidad, sobresalen todas en las temporadas de la mejor competencia del planeta: las Grandes Ligas de Estados Unidos (MLB).

Fuga de talento

Para Barrera, espectador de béisbol, esa sobredosis de talento es una bendición y una condena: «Ha disminuido un poco la calidad de la pelota en el sentido general. Muchos han abandonado el país por diferentes cuestiones».

La fuga histórica de talento ha sido la norma en Cuba desde hace décadas. Muchos beisbolistas aprovechan las giras internacionales con su selección para abandonar las concentraciones; otros salen ilegalmente del país para ser fichados como agentes libres.

Fotografía del 27 de marzo de 2025 del estadio de béisbol más importante de la isla, el Latinoamericano, en La Habana (Cuba). EFE/ Ernesto Mastrascusa
Fotografía del 27 de marzo de 2025 del estadio de béisbol más importante de la isla, el Latinoamericano, en La Habana (Cuba). EFE/ Ernesto Mastrascusa

Según cifras citadas por el periódico oficial Trabajadores, entre 2016 y 2022 un total de 635 peloteros isleños abandonaron el país (la cifra contempla salidas con y sin permiso del Estado). La tendencia desde entonces no ha cambiado.

Durante décadas, los astros cubanos que brillaron en la MLB fueron tildados como desertores o traidores –aunque en el Clásico Mundial 2023, Cuba convocó por primera vez desde 1959 a jugadores activos en la liga estadounidense– y, a diferencia de la liga española de fútbol, la televisión estatal no transmite los encuentros de la MLB.

Esta paradoja evita que Denilson Pino, de 23 años y acomodador en el Latinoamericano, pueda ver a su ídolo: Yulieski Gurriel, inicialista cubano de los Padres de San Diego.

Eso sí, cuando se le pregunta si prefiere a Gurriel –dos veces campeón de la Serie Mundial, guante de oro y campeón de bateo de la Liga Americana– o al portugués Cristiano Ronaldo, Pino tampoco duda: «CR7».