El Tribunal Supremo ha decidido que un jubilado puede quedarse con los 12.000 euros de pensión que recibió por error, al entender que el hombre no era consciente de que no cumplía con los requisitos para percibirla. En una sentencia fechada el pasado 5 de marzo, la sala de lo social desestima el recurso de casación para la unificación de doctrina presentado por el Servicio Público de Empleo Estatal y confirma una sentencia de marzo de 2022 del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM).
En 2015, se le reconoció a un hombre el subsidio por desempleo para mayores de 55 años, que percibiría hasta alcanzar la edad que le permitiría acceder a la pensión de jubilación; hasta la fecha del pleito judicial, había recibido 12.030,84 euros. Ya en 2019, la Seguridad Social consideró que no había cotizado lo suficiente para tener derecho a la pensión contributiva de jubilación, ya que acreditó solo 228 días cotizados hasta marzo de 2015, por lo que le reclamaban los importes indebidamente percibidos.
El TSJM dio la razón al jubilado, y ahora, lo que ha aclarado el Supremo es si el beneficiario del subsidio por desempleo para mayores de 25 años que le fue reconocido por el SEPE por error —previa comunicación equivocada del INSS—, debe o no proceder a la devolución de lo percibido por aquel concepto.
Al contrario que en otros casos ya examinados en los tribunales españoles, no consta que “en momento alguno” el afectado tuviera conocimiento de que no reunía los requisitos para estar percibiendo el subsidio de desempleo y que, a pesar de ello, siguiera percibiéndolo sin intentar regularizarlo.
No es lo mismo, destaca el Supremo, tener conocimiento de que se están percibiendo indebidamente determinadas cantidades —como consta expresamente en una sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), el conocido como caso Cakarevic—, que no tener conocimiento de dicha circunstancia, como es el caso de la sentencia recurrida.
El caso Cakarevic se refiere a una ciudadana croata que sí tenía conocimiento de que no reunía los requisitos para ser beneficiaria de la pensión de jubilación, sin que hiciera nada para corregir dicha situación.