MADRID 13 May. (EUROPA PRESS) –
La derrota del Real Madrid en el Clásico de Montjuïc ante el FC Barcelona por 4-3 acabó prácticamente con la última oportunidad madridista de levantar uno de los tres grandes títulos en juego esta temporada y volvió a evidenciar un preocupante bajón de rendimiento defensivo, en una campaña con muchas lesiones atrás, pero también el ofensivo, con Vinícius Júnior, Jude Bellingham y Rodrygo Goes muy por debajo de las expectativas y un Kylian Mbappé que ha cumplido, aunque por rachas.
Tras el duro golpe de la Copa del Rey en La Cartuja, el equipo entrenado por Carlo Ancelotti volvió a naufragar, esta vez en LaLiga EA Sports, ante un conjunto azulgrana que le ha vencido en los cuatro Clásicos oficiales de este curso, con un contundente balance goleador de 16-7 para los de Hansi Flick.
Con este registro, era prácticamente imposible poder levantar algún trofeo importante y así será, siete puntos por detrás del Barça a falta de nueve por disputarse en Liga. Y, aunque las graves lesiones -hasta cinco- en la zaga han podido ser claves, el bajón de los ‘Vini’, Bellingham y Rodrygo, en comparación con una pasada temporada excepcional, ha terminado por enterrar las opciones madridistas.
El ‘5’ y el ‘7’ tienen, estadísticamente, números positivos en general, pero su rendimiento ha sido excesivamente irregular, sobre todo en este 2025 donde ambos se ha combinado para marcar 13 goles, casi la mitad de los que ha hecho un Mbappé, al que igualmente le han pesado algunos altibajos y no estar fino en algunos partidos importantes.
La pasada campaña, las aportaciones de los dos brasileños y el inglés fueron determinantes para el doblete Liga-Champions. En especial, el centrocampista brilló en un sistema solo con dos delanteros y con él como punta del rombo en la medular, convirtiendo 23 goles en todas las competiciones y repartiendo 13 asistencias, en el primer año sin Karim Benzema, principal ariete de los merengues hasta la 2022-2023.
En la presente temporada, la llegada de Mbappé restó responsabilidad ofensiva a Bellingham, con un rol más de construcción, y esto ha reducido su actividad goleadora, con 13 goles, aunque ha mantenido la de asistente con 12 pases de gol. Físicamente ha estado por debajo de la pasada temporada, quizá lastrado por los problemas del hombro, pero da la sensación de haber acabado fundido.
También ha dado un bajón el ‘7’ madridista. Sus 24 goles y 10 asistencias, generando 34 goles para su equipo, en la 2023-2024, siendo decisivo en la conquista de la decimoquinta Copa de Europa -celebró 6 tantos y marcó en la final- le permitieron incluso luchar por el Balón de Oro, pero precisamente desde ese revés individual no ha sido el mismo.
Comparaciones constantes y dudas sobre su adaptación a un ‘nueve’ como Mbappé aparte, Vinícius solo ha recogido el balón de la red en cuatro ocasiones en los últimos tres meses -24 partidos-, y su último gol fue en la vuelta de cuartos de final de Champions frente al Arsenal, para un total de 21 en lo que va de curso -más 15 asistencias-. No parece tan fresco como antaño, se esfuerza menos en la presión -poco más de 41 intentos de media por los más de 50 del curso pasado-, muy lejos de su mejor versión que sí se ha visto en las últimas temporadas.
En peor lugar queda un Rodrygo que parece incluso haber perdido el sitio en el once en las últimas semanas. El brasileño fue uno de los grandes señalados en la reciente final de Copa, sustituido en el descanso y sin apenas impacto en los partidos claves, no como en el pasado, cuando fue el héroe en noches europeas importantes. La sequía del paulista le ha condenado y ya es preocupante, con solo un tanto desde finales de febrero, el octavo en un nuevo año donde arrancó bien para ‘desaparecer’, y sin marcar desde enero en Liga.
MBAPPÉ ACELERA EN 2025
Una segunda mitad de campaña muy pobre, que solo le permiten sumar 14 goles y 9 asistencias, mientras que la temporada pasada llegó a celebrar 17 tantos. No son datos que le dejen en muy mal lugar, pero las sensaciones no han sido buenas, con rumores de salida y siendo siempre el primer cambio de los ‘cuatro fantásticos’ cuando Ancelotti decidía retocar algo, también en el punto de mira por su compromiso, con solo 31 esfuerzos de presión por partidos, algo que se le ha achacado a todo el equipo este curso.
La única nota positiva de la parte ofensiva del Real Madrid es Mbappé, que ya es el jugador que más goles ha marcado en la temporada debut con la camiseta blanca. El francés, con 39 tantos, aunque con más competiciones para sumar, superó los 37 de Iván Zamorano con un ‘hat trick’ en el Clásico, pero el parisino fue solo a la ‘guerra’ este domingo. Además, se sitúa líder en solitario en la lucha por el ‘pichichi’ con 27 dianas, pero da la sensación de que nunca ha terminado de mezclar de la mejor manera posible con Vinícius Jr.
Sin embargo, Mbappé ha brillado por rachas. Le costó adaptarse al Real Madrid, con demasiados errores e intentos para convertir goles, incluso falló dos penaltis seguidos en Anfield y San Mamés, donde tocó fondo. Desde ahí, fue otro delantero, más incisivo y efectivo, lo que ratifican sus 25 goles en este 2024, aunque él solo no ha podido sostener la ambición de todo un equipo.
Pese a ello, también ha tenido lagunas como el hecho de que no marcó en los últimos cuatro partidos de la Champions tras haber tenido su mejor noche europea como madridista ante el Manchester City, con un triplete en el Santiago Bernabéu. Aún así, está a solo cinco tantos, a falta de tres encuentros, de igualar la mejor racha goleadora de su carrera (44), el curso pasado con el PSG.