Paloma H. Matellano Madrid
Actualizado Miércoles,
22
enero
2025
–
10:20
El 21 de noviembre del pasado año, el comisionista investigado en el caso Koldo, Víctor de Aldama, relató ante el juez de la Audiencia Nacional las comisiones que presuntamente se le pidieron y repartió a distintos cargos políticos en los últimos años. Entre los señalados en el listado que enumeró estaba Carlos Moreno, jefe de Gabinete de la vicepresidenta María Jesús Montero, de quien dijo que le llegó una petición para que se le entregasen 25.000 euros. Este miércoles, dos meses después, Moreno ha podido responder a las acusaciones en la Comisión de Investigación del Senado.
«Nunca jamás he recibido ni aceptado ningún pago ni regalo alguno por ninguna gestión relacionada con mi trabajo en la administración, nunca jamás», ha sostenido al inicio de su comparecencia, para posteriormente anunciar que no iba a responder a las preguntas de los senadores «en aras de no perjudicar las acciones legales para limpiar [su] nombre que ya se han emprendido ni perjudicar, si llegara el caso, [su] legítimo derecho a la defensa».
Aldama, en la Audiencia Nacional, afirmó que pidió a Koldo García que le ayudara para conseguir un aplazamiento con Hacienda del pago de una de sus sociedades y el entonces asesor del ex ministro José Luis Ábalos se ofreció a resolverlo. El empresario explicó que tramitaron ese favor a través del jefe de Gabinete de la ministra María Jesús Montero.
«Se nos concede el aplazamiento y a los dos meses Koldo [García] me dijo que tendría que tener un detalle con Carlos Moreno, que estaba buscando un piso y se me piden 25.000 euros. Se organizó una reunión debajo del Ministerio, donde hay un bar, y Koldo [García] le entregó el sobre a Carlos Moreno», abundó Aldama. En su teléfono, intervenido por la UCO, se encontraron pantallazos que le envió Koldo García de sus chats con Carlos Moreno, en los que quien fuera la mano derecha de Ábalos solicitaba al hoy compareciente diversas gestiones. «Ayúdame».
«En las últimas semanas han aparecido en los medios acusaciones sobre mi persona tan graves como infundadas», ha reprochado Moreno en el Senado. «Sigo sin salir de mi asombro de cómo alguien en el ejercicio de su derecho a defenderse puede implicar con semejantes calumnias a una persona que sabe inocente, y lo que es peor, cómo algunos pueden dar más credibilidad a un delincuente confeso que a una persona que lleva más de 20 años de intachable servicio público», ha ahondado.
El jefe de Gabinete de la ministra Montero -por quien ella pone «la mano en el fuego»– ha defendido su derecho a guardar silencio, pese a las críticas de los senadores y del presidente de la Comisión, que le ha instado a «explicar pregunta a pregunta por qué no quiere contestar». «Me remito a mi declaración inicial», ha repetido una y otra vez Moreno ante las cuestiones planteadas por los parlamentarios.
«Se me ha colocado en una posición muy complicada para poder defender mi inocencia y limpiar mi nombre», ha denunciado el compareciente, para únicamente insistir en su inocencia: «No he participado en contratos, licencias, concesiones o ayudas relacionadas con la intermediación de Koldo García o las demás personas investigadas».
El jefe de Gabinete de la vicepresidenta primera ha manifestado su «confianza» en que la situación «se aclare cuanto antes», aunque ha lamentado: «La pena de telediario que vengo sufriendo no tiene reparación».