Barcelona (EFE).- «El arte es el enemigo de la guerra», ha dicho en Barcelona el artista irlandés Sean Scully, en su vuelta a la ciudad donde vivió 14 años y en la que repasa toda su trayectoria en una exposición en La Pedrera, desde la figuración inicial a la pintura abstracta.
Scully, que ha presentado la muestra en un correcto castellano, ha confesado que esta invitación de la Fundació Catalunya La Pedrera es «como volver a casa» y aunque en algún momento se vinculó su marcha al ‘procés’ independentista, ha aclarado que se instaló en Nueva York por una simple cuestión, la escolarización de su hijo, que, con 15 años en la actualidad, sigue condicionando su vida.
La exposición se podrá ver desde el 14 de marzo hasta el 6 de julio y reúne más de 60 obras, entre pinturas, esculturas, fotografías, dibujos, acuarelas y pasteles, creadas a lo largo de más de 60 años de trayectoria.
En ese recorrido se pueden ver las primeras piezas figurativas de sus inicios en los años 60, como ‘Figure in a Room’ (1967), «al principio por influencia del fauvismo’, pero la transición hacia la abstracción fue en su caso natural desde ese figurativismo porque, «además, la abstracción era entonces muy universal».
Minimalismo y abstracción geométrica
De los años 70 son sus piezas minimalistas, cuadros de gran tamaño en los que se vio influenciado por el mundo industrial londinense como en ‘Overlay #4’ (1974) o ‘Hidden Drawing #3’ (1975); o por una visita a Marruecos y la abstracción geométrica de sus edificios, que tiene su reflejo en el entramado en diagonal de ‘East Coast Light 2’ (1973), realizado en Boston.
El Nueva York de los años 70, reconoce, era muy duro para un artista, «dominado por el minimalismo», y de ese período es su ‘Black on Black’ (1979), formado por una sucesión de rayas horizontales negras y grises, en el que trabajó durante cinco años, que requería «una exigencia extraordinaria de concentración».
Durante la presentación se ha detenido un momento en su particular homenaje a África, una obra de 1979, que «el Reina Sofía tiene en el almacén, al parecer porque ahora solo les interesa mostrar documentos, archivos y vídeos y no la pintura, pero es un rumor que corre», ha ironizado.
A finales de los años 80 en sus cuadros desaparecieron las figuras y aparecieron los rectángulos a modo de ventanas que se insertaban en el lienzo para «desgarrar el espacio pictórico», como en ‘Black Robe’ (1987).
Obra creada en su estancia en Barcelona
En un espacio dedicado a la obra creada en Barcelona se pueden contemplar ‘Barcelona Band of Light’ (2004), ‘Barcelona Dark Wall’ (2004), ‘Barcelona 10.3.98’, que fue el cartel de las fiestas de la Mercè de la ciudad, así como obras sobre papel y fotografías.
‘Tin Mal’ (1997), inspirado en una mezquita; ‘Wall of light Arran’ (2002); ‘Smalk Cubed 14’ (2023), ‘Ukbar Sofia’ (1994); sus pequeñas cajas pintadas como ‘Floating Munich Box’ (1996) o fotografías de superficies como ‘Barcelona Painted Wall (1997) completan ese panorama creativo.
En el recorrido expositivo se puede ver asimismo una selección de esculturas que se verán por primera vez como la nueva escultura ’55’ (2025), creada para la ocasión, que con sus seis metros de altura y sus múltiples colores se erige en el patio interior de La Pedrera en diálogo con Gaudí; o ‘Venice Stack’ (2020), realizada con cristal de Murano.
Scully cree en el «poder transformador» del arte y quizá el mejor ejemplo es la escultura totémica ‘Zinc Block Tall’ (2021), hecha con los depósitos de agua galvanizados como «los que recogían agua en el Londres de su infancia, que tenía el 12 % de sus edificios destruidos por la Segunda Guerra Mundial».
Cerradas sus casas, por las actividades educativas y deportivas de su hijo, solo mantiene una en Aix-en-Provence, «para mantener el contacto con Europa y con la naturaleza».