Gerardo Cuerva, actual presidente de la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), ha presentado este lunes el programa con el que se presenta a las elecciones del próximo 20 de mayo, con el objetivo de renovar su mandato y “reforzar e intensificar la firme defensa de las pymes” frente a un entorno económico y regulatorio que considera cada vez más adverso. En algo más de dos semanas, Cuerva se medirá en las urnas con Ángela de Miguel, presidenta de CEOE-Cepyme Valladolid y candidata que cuenta con el respaldo explícito de Antonio Garamendi, presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), lo que ha generado tensiones dentro de la confederación.
La reelección del presidente de Cepyme llega en un momento crítico para el sector. Las pequeñas y medianas empresas, que constituyen más del 99% del total del tejido empresarial español, enfrentan un entorno cada vez más desafiante, marcado por el aumento de los costes laborales, la incertidumbre regulatoria y una recuperación económica desigual tras la pandemia y la guerra en Ucrania y ahora con el desafío que supone la política comercial arancelaria del presidente de Estados Unidos Donald Trump.
Bajo el lema “El valor de las empresas españolas”, Cuerva centra su programa en la libertad de empresa, frente a lo que califica como una escalada de trabas normativas, fiscales, laborales y burocráticas desde las Administraciones públicas. El objetivo, recoge el programa de su candidatura, es reforzar el papel de las pymes en la economía española y consolidar una Cepyme más útil y autónoma, “en el marco de la unidad empresarial con la CEOE”.
El documento se articula sobre cinco principios: la independencia política de las organizaciones empresariales, la defensa del empresariado, la recuperación de la libertad de empresa, la creación de un marco más competitivo y el impulso a la productividad de las pymes. “Si las organizaciones empresariales no defienden a la empresa, ¿quién lo hará?”, recuerda Cuerva, citando al que fuera presidente de la patronal CEOE, José María Cuevas, entre 1984 y 2007.
En España existen más de tres millones de pymes que generan más de 10 millones de empleos y representan el 65% del valor añadido bruto de la economía. “No podemos estar callados ni ser comparsas de nadie”, afirma el presidente de Cepyme, que en una carta abierta dirigida al tejido empresarial ha hecho un llamamiento a la participación en el próximo proceso electoral.
Cuerva advierte del riesgo que suponen las políticas actuales para la competitividad de las pymes, señalando que los costes han aumentado exponencialmente por decisiones del Gobierno central, las comunidades autónomas y ayuntamientos y también desde Bruselas. Y denuncia: “La empresa española está siendo objeto de políticas que dificultan su desarrollo y competitividad” debido a regulaciones, dispares en muchas ocasiones, que dificultan el desarrollo empresarial.
Plantea ocho objetivos prioritarios, entre ellos la reducción de la presión fiscal, especialmente en cotizaciones sociales; mayor flexibilidad laboral; unidad de mercado y reducción de cargas; negociación colectiva sin intervención; detener la sobrerregulación; lucha contra la morosidad; impulso a la transformación digital, y reforma interna de Cepyme para hacerla más profesional y participativa.
Desde su elección en 2021 (tras dos años de presidencia interina), Cuerva destaca un mandato marcado por iniciativas que han elevado el perfil de Cepyme. Sin embargo, su contrincante en las elecciones del 20 de mayo, Ángela de Miguel, ha criticado su gestión en diversas ocasiones al decir que las pymes tienen un sentimiento absoluto de abandono. También ha lamentado que públicamente no se conoce lo suficiente a la organización que aspira a presidir.
De Miguel plantea un modelo de Cepyme con más visibilidad y una conexión más activa con el empresariado y critica la gestión de Cuerva por su supuesta falta de presencia.