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Cuerpo reconoce que las negociaciones con Trump por los aranceles…

MADRID 28 May. (EUROPA PRESS) –

El ministro de Economía, Comercio y Empresa, Carlos Cuerpo, ha reconocido este miércoles que las negociaciones entre la Unión Europea y Estados Unidos a cuenta de los aranceles norteamericanos «no están siendo sencillas», aunque la Comisión Europea tiene «la mano tendida» para intentar llegar a un acuerdo «justo y equilibrado».

Eso sí, Cuerpo ha advertido de que Bruselas es consciente de que la situación actual «no debería ser el punto de partida de la negociación», porque, aunque está vigente la tregua de 90 días que dio Estados Unidos para implantar un gravamen generalizado del 20%, está en vigor un arancel del 10% a los productos europeos, además del 25% que ya estableció Estados Unidos para el acero y aluminio y para el sector del automóvil.

«Lo que se ha hecho es poner una pausa de 90 días a 10 puntos de esos 20 generalizados, pero se mantienen otros 10, más el 25% del automóvil, más el 25% del acero y el aluminio. Nosotros lo que queremos es que no se instale esa situación actual como el punto de partida de la negociación. Y si es posible, avanzar aún más en la integración», ha señalado Cuerpo en declaraciones a la cadena SER recogidas por Europa Press.

El ministro ha subrayado que la relación Estados Unidos-Europa es la relación comercial «más importante del mundo», pues 4.600 millones de euros pasan día a día por el Atlántico en transacciones.

«Por lo tanto, esto es un tesoro que tenemos que proteger. Queremos hacerlo y desde Europa, desde luego, mano tendida. Dicho esto, no podemos ser ingenuos en cuanto a la posición inicial negociadora, ni tampoco en este caso no utilizar los instrumentos y las herramientas que están a nuestra disposición para proteger a las industrias, a los consumidores y a los trabajadores europeos», ha recalcado.

De hecho, Cuerpo ha recordado ya se puso sobre la mesa un primer paquete de aranceles de Europa a productos estadounidenses que afectarían en torno a 20.000 millones de euros en exportaciones estadounidenses.

«Esto se ha quedado también en suspenso mientras negociamos, pero en paralelo seguimos trabajando con posibles respuestas si es que estas negociaciones no llegan a buen puerto. Ahora mismo, hay una prioridad muy clara, que es que estas negociaciones terminen en un acuerdo justo y equilibrado, que es lo que queremos», ha insistido.

Preguntado por si se puede negociar con un presidente como Donald Trump, que cambia las reglas de juego de un día para otro, el ministro ha apuntado que es importante mantenerse «por debajo de la fluctuación diaria, del ruido diario», y mantener una negociación con una visión de medio o largo plazo, «no sobrerreaccionar» y dejar claro que Europa es un socio «estable, confiable y coherente».

«Independientemente de lo que nos encontremos del otro lado de la mesa, creo que lo que estamos viendo en los últimos días son avances, una actitud constructiva, y estamos pudiendo empezar a avanzar en una negociación, no solo a nivel político, sino ya también a nivel técnico, definiendo las principales dimensiones y empezando a aterrizar y a dejar que, en este caso, que los técnicos trabajen», ha subrayado.