Seúl (EFE).– Los surcoreanos acuden este martes a las urnas para votar a su nuevo presidente tras la destitución de Yoon Suk-yeol por su declaración de la ley marcial que, aunque breve, ha sumido al país en su peor crisis política en democracia y polarizado al electorado.
La votación abrió a las 6:00 hora local (21:00 GMT del lunes) en 14.295 centros electorales de todo el país y se prolongará hasta las 20:00 (11:00 GMT), de acuerdo a la Comisión Electoral Nacional.
La participación se situaba en el 9,2 % tres horas después de la apertura de las urnas, con 4,09 millones de votos registrados hasta ese momento, según la comisión, superior al 8,1 % que se habían producido a la misma hora en los comicios de 2022, pero por debajo del 9,4 % contabilizado en los de 2017.
Un total de 44.391.871 personas están llamadas a votar en Corea del Sur, entre los que se encuentran los 15,4 millones que ya emitieron su sufragio durante los dos días de votación anticipada la semana pasada, un 34,74 % del electorado, un porcentaje récord desde que el sistema fue introducido en el país asiático en 2014.
El recuento de los votos podría terminar el miércoles
El recuento de votos comenzará inmediatamente después del cierre de los centros electorales y se espera que en torno a la medianoche se conozca al ganador, aunque la Comisión Electoral Nacional estima que el conteo total de papeletas concluirá alrededor de las 6:00 del miércoles (21:00 GMT del martes).
Una vez finalizado el recuento, la Comisión Electoral surcoreana convocará una reunión plenaria entre las 7:00 y las 9:00 para aprobar formalmente los resultados electorales.
Las elecciones anticipadas surcoreanas tienen lugar exactamente seis meses después de que Yoon declarara de forma sorpresiva la ley marcial, evocando recuerdos de los regímenes militares del pasado y desatando la peor crisis política y social del país en décadas.
El estado de excepción estuvo en vigor durante seis horas antes de ser tumbado por el Parlamento controlado por la oposición. El exmandatario justificó la medida por supuestas «amenazas antiestales» de otras fuerzas políticas.
La destitución de Yoon se dio definitivamente el 4 de abril por el Tribunal Constitucional, la segunda decisión judicial de este tipo en la historia democrática del país y que obligó a adelantar elecciones.
El expresidente enfrenta un proceso por insurrección y abuso de poder, y su figura continúa pesando sobre la campaña. Aunque abandonó el conservador Partido del Poder del Pueblo (PPP), ha instado a sus simpatizantes a apoyar a su heredero político, el exministro de Trabajo Kim Moon-soo, quien ha mostrado ambigüedad sobre su postura respecto a la fallida ley marcial.
Lee Jae-myung lidera intención de voto para las elecciones
Kim Moon-soo ha centrado su campaña en aprovechar los múltiples juicios en curso contra el principal candidato del opositor Partido Democrático (PD) y líder en las encuestas sobre intención de voto, el liberal Lee Jae-myung, quien se ha mostrado partidario de castigar a los responsables de intentar instaurar la ley marcial.
Dado que las elecciones se celebran de forma anticipada para sustituir a Yoon y en medio de un Gobierno interino, el nuevo presidente asumirá el cargo de inmediato, sin período de transición.
Se espera que la ceremonia de investidura tenga lugar el propio miércoles, horas después de conocerse los resultados, aunque los detalles se confirmarán una vez se determine al nuevo mandatario.
Cinco candidatos participan en la carrera presidencial surcoreana.
Además de Lee y Kim, que según las encuestas más recientes acaparaban alrededor del 49 % y del 37 % en intención de voto, respectivamente, también concurren Lee Jun-seok, del minoritario y conservador Partido de Nueva Reforma (NRP), en tercer lugar en los sondeos con un 10 % de apoyo; Kwon Young-kook, del Partido Democrático del Trabajo (DLP), y Song Jin-ho, candidato independiente.