Naciones Unidas (EFE).- El Consejo de Seguridad de la ONU votará en la tarde del miércoles una «resolución humanitaria» sobre Gaza con dudas sobre si Estados Unidos la apoyará o al menos no usará su derecho de veto, como ha hecho ya en múltiples ocasiones para evitar resoluciones críticas con Israel.
La resolución la presentó el grupo llamado E10, es decir, los diez miembros no permanentes del Consejo de Seguridad, por lo que tiene asegurada la mayoría de dos tercios para salir adelante, siempre que no la vete una de las cinco potencias con asiento permanente (EE.UU., Rusia, China, Francia y Reino Unido).
El texto de la resolución ha sido «pulido» precisamente para suscitar el máximo consenso posible, y de hecho apenas hay una mención directa a Israel, en su preámbulo, sin críticas directas.
El pedido de la resolución que vota la ONU
Solo contiene tres puntos: pide un alto el fuego inmediato e incondicional, reitera la demanda de que Hamás libere a los rehenes israelíes y exige «eliminar de inmediato todas las restricciones a la entrada de ayuda humanitaria en Gaza a gran escala» y «restaurar todos los servicios esenciales» en la franja.
Eso sí, hay en el preámbulo un llamamiento a «la retirada completa de las fuerzas israelíes de Gaza» que Estados Unidos podría considerar inaceptable, aunque para ganar el apoyo de Washington también incluye un apoyo claro a «los esfuerzos de Catar, Egipto y EE.UU.» para volver a las negociaciones de paz.
La catastrófica situación humanitaria en Gaza en los dos últimos meses -donde se ha pasado de una interrupción total de la asistencia a un escenario de ayudas caóticas y que han terminado en matanzas- ha motivado críticas a Israel por parte de países habitualmente aliados suyos, como Francia, Reino Unido o Alemania, pero no así de Estados Unidos.