París (EuroEFE).- La Comisión Europea y Francia anunciaron este lunes un programa para atraer a la UE a investigadores y científicos, especialmente a aquellos desalentados por los desafíos que ha planteado a la ciencia y las universidades de EE.UU. el regreso al poder de Donald Trump.
La iniciativa ‘Choose Europe for Science’ (‘Elige Europa para la ciencia’) está dotada con 500 millones de euros en el periodo 2025-2027 e incluye un compromiso de elevar los fondos dedicados a la investigación y el desarrollo (I+D) hasta el 3 % del producto interior bruto (PIB) para 2030.
Bruselas creará además una «súper beca» de siete años para ofrecer «una perspectiva de largo plazo a los mejores», explicó la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, durante la conferencia celebrada en la Universidad de la Sorbona, en París.
Más fondos y becas para los jóvenes
El plan, ideado originalmente por el Gobierno francés, se ha ampliado a toda la UE al calor de los ataques de Trump contra algunas universidades estadounidenses y contra varios programas de investigación, como en el terreno del cambio climático.
«Europa siempre elegirá la ciencia«, prometió Von der Leyen, al asegurar que la investigación científica es «el combustible del progreso y del crecimiento en nuestras sociedades».
Europe’s choice is clear.
To put science at the heart of its economy.
To become the home of scientific freedom and collaboration.
And to welcome talent from all over the world.
I’m glad to present the first elements of our Choose Europe Initiative ↓ https://t.co/5BXE11w9fs
— Ursula von der Leyen (@vonderleyen) May 5, 2025
Dentro de la iniciativa, además, se duplicará el dinero que pueden recibir este año los investigadores que se instalen en la Unión Europea, con la intención de que eso se prolongue los dos próximos años.
Von der Leyen prometió igualmente becas para los jóvenes que empiezan su carrera científica, más remuneradas y con contratos más largos.
Críticas a la política de Trump
El presidente francés, Emmanuel Macron, anfitrión de la conferencia junto a Von der Leyen, se encargó de lanzar críticas, aunque sin alusiones directas, a la política de Trump en el terreno de la ciencia y de las universidades.
Advirtió de que «no hay democracia que aguante mucho si no hay una ciencia libre, abierta».
«¿Cómo debatir en nuestras sociedades -añadió Macron- si se cuestionan los hechos, la verdad, bien por una especie de relativismo absoluto, de escepticismo completo, por una verdad revelada o porque el poder político podría decir que esto es verdadero y que esto es falso?».
En la misma línea, la ministra francesa de Educación, Elisabeth Borne, lamentó los «retrocesos sin precedentes» para la ciencia y la investigación en particular en Estados Unidos, que «ha sido el paraíso de los investigadores» y donde ahora «se cuestiona la libertad académica«.
Las trabas en la UE
Von der Leyen admitió en su discurso que que hay una serie de «deficiencias» en la UE, como que los investigadores tienen que hacer frente a «demasiada» burocracia o «demasiado compleja».
Defendió que hay que ofrecer perspectivas de largo plazo a los investigadores y simplificar el paso desde la investigación básica a sus aplicaciones empresariales.
«Queremos asentar la libertad de la investigación científica en la ley«, dijo, antes de hacer hincapié en que no se comprometerán sus principios.
«Europa -concluyó- ha tomado su decisión. Hemos decidido empezar una nueva era de invención y de descubrimiento. Hemos decidido poner la investigación, la ciencia y la tecnología en el centro de nuestra economía«, subrayó.
La UE acoge ya a dos millones de investigadores, la cuarta parte de los de todo el mundo, y cada euro invertido en ciencia genera 11, según datos de la Comisión Europea.
Los europeos ya son punteros en muchos campos, como las tecnologías verdes, la salud, la economía o las ciencias sociales, recordó Von der Leyen.
Se refirió en particular su programa Horizon Europe dotado con 93.000 millones de euros que, entre otras cosas, es «un imán para la cooperación global y ha mostrado pruebas del éxito científico europeo», como los 33 premios Nobel obtenidos en los últimos 40 años.
Europa como «santuario»
La comisaria europea de la Investigación y la Innovación, Ekaterina Zaharieva, defendió en el mismo sentido la necesidad de convertir a Europa en «un santuario» para la investigación, con unas condiciones adecuadas, ante el «escepticismo creciente» hacia el conocimiento científico.
«Estamos decididos a que Europa sea el mejor lugar del mundo para hacer investigación«, aseguró la comisaria europea, y dijo que para ello son necesarias unas remuneraciones «justas» para «atraer a los mejores talentos y que se queden».
Entre los desafíos para ello, Zaharieva recordó que tres cuartas partes de los científicos en la OCDE no disponen de seguridad en el empleo y que las mujeres ocupan únicamente la cuarta parte de los puestos de responsabilidad en las universidades.