Saná (EFE).- Los rebeldes hutíes del Yemen reivindicaron este viernes una doble operación contra Israel y los buques de guerra estadounidenses desplegados en los mares Rojo y Arábigo que se desarrolló esta madrugada después de que EE.UU. bombardeara el puerto petrolífero de Ras Issa, dejando decenas de muertos y centenares de heridos.
«La fuerza de misiles de las Fuerzas Armadas del Yemen (hutíes) llevó a cabo una operación militar contra un objetivo militar en las proximidades del aeropuerto Ben Gurion, en la región ocupada de Jaffa, utilizando un misil balístico «Zulfiqar»», informó en una intervención televisada el portavoz militar hutí, Yahya Sarea.
Sarea informó también de «otra operación dirigida contra los portaaviones estadounidenses Truman y Vinson y sus buques de guerra en los mares Rojo y Arábigo con varios misiles de crucero y drones».
Según declaró, este es el primer ataque al portaaviones Vinson desde su reciente llegada al mar Arábigo.
«Nuestras defensas aéreas lograron derribar un avión no tripulado estadounidense MQ-9 mientras realizaba operaciones hostiles en el espacio aéreo de la Gobernación de Saná, utilizando un misil tierra-aire de fabricación local», agregó, sobre el que definió como el quinto incidente de este tipo en tres semanas.
Escalada militar de EEUU en Yemen
Sarea advirtió de que la escalada militar estadounidense con el Yemen sólo conducirá a más ataques que le llevarán «decepción, fracaso y derrota», y reafirmó que los rebeldes mantendrán sus operaciones mientras perdure la guerra en la Franja de Gaza.
El portavoz no se refirió directamente al bombardeo que lanzó EE.UU. en la noche del jueves contra el puerto petrolero de Ras Issa, en la provincia yemení de Al Hudeida, en el mar Rojo, y que hasta el momento ha dejado al menos 74 muertos y 171 heridos, según los insurgentes.
El Comando Central de Estados Unidos (Centcom) aseguró, en un comunicado, que destruyó el puerto de combustible de Ras Issa, controlado por los insurgentes, a quienes acusan de beneficiarse económica y militarmente de estas instalaciones para vender combustible y financiar sus operaciones.