‘The Last Showgirl’, el título de la película dirigida por Gia Coppola que Pamela Anderson presentó en el pasado Festival de San Sebastián y que acaba de llegar a las pantallas de cine de toda España, no puede definirla mejor. Indiscutible mito erótico de los 80 y los 90 gracias a C. J. Parker, su personaje en ‘Los vigilantes de la playa’ desde 1992 a 1997, la actriz se reinventa, venga y redime en una cinta que, sin terminar de convencer a la crítica, ha llegado como algo más que una declaración de intenciones.
A sus 57 años, Pamela no se anda con rodeos: grita y se alza contra el patriarcado que la sexualizó durante la mayor parte de su carrera. Ahora prefiere dejar de lado los escándalos que ha protagonizado, muchos junto a su ex marido Tommy Lee, y diseccionar, sin fisuras, el lado más oscuro de la industria a través de la historia de una bailarina cuyo espectáculo se acaba. Con treinta años de carrera a la espaldas y una hija que, hasta el momento, ha estado en un segundo plano, se enfrenta a una de las etapas más difíciles de su vida. En la carrera de la actriz destacan películas como ‘Barb Wire’ o ‘Scary Movie 3’ y numerosas participaciones en series de televisión.
Sobre por qué aceptó la película: «Nunca me habían ofrecido algo así»
«Siempre he sentido que me quedaba algo por dar, pero mantuve ese pequeño fuego ardiendo en mí y, cuando llegó esta película, estaba preparada. Me dije: ‘Vale, hagámoslo, puede que nunca vuelva a tener esta oportunidad’. Sentí que era cuestión de vida o muerte en cuanto leí el guion, fue la primera vez que un material me ponía nerviosa por pura necesidad de hacerlo. Me moría de ganas de comenzar a rodar, nunca me habían ofrecido un buen guion de verdad. Y, ahora, siento que acabo de empezar una nueva etapa».
Sobre los altibajos en su carrera: «He dudado de mí misma muchas veces»
«Aunque la gente no crea en ti, tienes que empujarte hacia adelante porque es muy fácil encasillar a alguien, siempre se encuentran razones para hacerlo. Pero hay que seguir, tienes que hacerlo por ti misma… Yo he dudado de mí misma muchas veces, pero proyectos como este te impulsan. Lo que he hecho en el pasado era lo correcto para mí en ese momento, y me siento afortunada de que se me haya dado esta oportunidad de entregar mi vida a algo que me gustaba, pero soy una actriz, no solo una celebridad. Me he dado por vencida muchas veces y me iba a cuidar del jardín pensando que todo había acabado. El activismo fue lo que me ayudó a superar esos años, hizo que todo tuviese sentido, pero este es otro capítulo».
Sobre lo que tiene en común con el personaje: «He usado mi experiencia, mis hijos, mi carrera…»
“Me veo cerca del personaje y, de hecho, he tirado de mi experiencia personal. Yo he tenido que lidiar con todo esto, desde ‘Los vigilantes de la playa’. Todos, en un momento u otro, nos enfrentamos al rechazo, a cómo cerrar el espectáculo… El guion me tocaba de cerca, pero es cierto que trabajamos mucho y de manera muy rápida. No había tiempo para sobrepensarlo. Estoy tan agradecida… Sabía que era capaz de hacer mucho más y no tenía nada que perder. Quizás sea la única oportunidad de interpretar un papel así y por eso usé mis experiencias, todas las que he tenido: mis matrimonios, mis hijos, mi vida, mi carrera… Es como una especie de adicción, es divertido”.
Sobre enfrentarse a un papel así: «He sido capaz de encontraruna manera de expresar algo de esa ira y dolor reprimido»
«Si tienes algún tipo de trauma en tu vida, buscas maneras de expresarte y de curarte. Algunas personas pintan, escriben poesía o componen una canción. Otras lo logran a través del arte y el cine, y yo he sido capaz de encontrar una manera de expresar algo de esa ira y dolor reprimido en este papel, pero soy nueva en esto, estoy aprendiendo, todavía trato de averiguar cómo funciona esto, no quiero decirle a nadie cómo debe hacer algo. Esto es algo que estoy experimentando yo en tiempo real. Es como una purga, es muy curativo.»
Sobre cómo su físico ha influido en su carrera: «Para mí, es mucho más sensual lo que hago ahora»
“Tengo 57 años y mi carrera ha tenido que ver con lo físico, así que todavía estoy viviendo esto. Ha sido un viaje, pero también una de las razones por las que me he embarcado en este proyecto y he hecho este experimento. Quería quitarme capas, ser quien soy, no ser definida por lo que dice la gente sino por lo que yo hago. No quería amargarme ni aburrirme buscando la alegría de trabajar en este negocio. Este es otro rasgo que estaba relacionado con el personaje de Shelly: cómo creía en el glamour, cómo estaba a punto de acabar… Es mucho más sensual para mí ahora que lo que fue en el pasado. Es importante ver Las Vegas de día, como una mujer sin maquillaje, más vulnerable, más íntima y reveladora”.
Sobre reconducir su carrera: «Sabía que lo podía hacer, nunca es demasiado tarde»
«Desde ‘Los vigilantes de la playa’ hasta Broadway no sé lo que ha pasado en medio. Me he perdido varias décadas de mi vida y, por eso, que me llamaran para interpretar este guion ha sido una bendición. Yo le decía a Gia: ‘¿Estás segura de que soy yo?’ Yo sé lo que puedo hacer, me sentía inspirada. Recuerdo que en ese momento estaba en mi jardín haciendo mermeladas y fue muy emocionante. Nunca es demasiado tarde, sabía que podía hacer más. Y ahora, a esta edad, siento que puedo hacerlo. Ahora me toca. Estoy muy agradecida”.
Sobre papeles para mujeres de más de 50 años en el cine actual: «Creo que es el momento»
«Creo que es el momento de contar estas historias. A los 50 sientes que pasas de una edad a otra, es una línea muy interesante con la que jugar. Es ese momento en el que decides si asumir el paso del tiempo o perseguir la juventud eternamente. La película incluye un gran mensaje sobre la unión y la sororidad, pero también es una historia interesante sobre una madre y una hija y sobre el hacernos mayores. No sé si es un film político, pero es provocativo y hace que mucha gente hable de cosas diferentes. No nos hacen la misma pregunta dos veces, está siendo muy interesante ver las reflexiones del público.Podría ser una obra muy superficial sobre estas chicas y sus espectáculos, sobre la ostentación y el glamour, pero ellas son el medio para hablar del sacrificio y la pasión de las personas que hacen que todo brille en ‘Las Vegas’. Hemos estado emocionalmente muy unidas al proyecto. Ese es el gran placer de crear una película, que resuene en la gente, que provoque, que empuje. Ha sido un placer escuchar todas estas reflexiones increíbles»
Sobre sus compañeras de rodaje: «Me enamoré de todas»
“Jamie Lee Curtis ella está llena de energía, es una fuerza de la naturaleza y me enamoré. De ella y de todo el elenco de actrices. Es increíble, me he sentido muy cercana a ellas. Hicimos varios ejercicios antes del rodaje…”
Sobre las verdaderas showgirls: «Espero que estén orgullosas»
“Contactamos con algunas de ellas, nos contaron historias, nos enseñaron a andar… Estaban muy orgullosas de su arte y de sus familias. Y espero que también estén orgullosas de la película cuando vean el resultado”.
Sobre la Pamela joven: «Quién me lo iba a decir…»
“¿Les cuento la historia de Playboy? En el Playboy escribí que quería ser buena madre y ganar un Oscar… pero estaba de broma. Es curioso y divertido. Quién me iba a decir a mí, con 25 años que iba a llegar aquí…”
Director digital de Fotogramas.es y el español vivo que ha visto y ve más cine español. Se mete 1,7 películas al día y escribe sobre ellas 40 horas a la semana desde hace 20 años. Y no solo cine patrio. Desde los títulos más indies hasta los blockbuster imprescindibles o lo más selecto de los festivales internacionales. Todo vale para alimentar su inagotable ansia cinéfila. Y, por supuesto, sin dejar de lado las series de televisión.
Por su grabadora ha pasado todo el ‘star system’ español… y gran parte del internacional. Desde que se licenció en Periodismo allá por… Bueno, desde que se licenció en Periodismo, ha trabajado en varias cabeceras de Hearst, como TP, Supertele o Teleindiscreta, antes de aterrizar en Fotogramas, curiosamente, la revista que le empezó a despertar su pasión por el séptimo arte desde bien pequeñito.
También es actor pero, a la espera del Goya Revelación, está felizmente encasillado en su papel.
Ricardo Rosado es crítico de cine, periodista cultural, experto en comedia norteamericana, películas de terror de cualquier tipo y todo lo que ocurra entre géneros y formatos. Criado entre películas de Steven Spielberg, y malcriado desde que se topó con David Lynch, lleva una década escribiendo sobre el arte que consume.
En FOTOGRAMAS le leerás comentando los últimos estrenos en salas, fomentando la paz entre fans de Marvel y DC, repasando todas las novedades de Star Wars o sumergido en las profundidades de los catálogos de Netflix, HBO Max, Prime Video y Filmin. También le gusta hacer galerías y rankings de películas y series, pero nadie se fía demasiado de su criterio.
Tras estudiar Comunicación Audiovisual en la Universidad Complutense de Madrid, creó un blog de reseñas cinematográficas con la esperanza de acudir gratis a festivales de cine y pases de prensa. Ahora, tras siete años escribiendo en FOTOGRAMAS sobre los últimos estrenos en salas, las series del momento y cualquier contenido disponible en los diferentes canales de streaming, sigue pensando que mereció la pena.
Frontman de dos vergonzantes proyectos musicales, director de diversos videoclips de bandas de heavy metal madrileñas y autor de no pocos cortometrajes escondidos en la red de redes, es el editor y uno de los orgullosos contertulios del podcast cultural ‘Los de al lado de Pumares‘, espacio que le ha permitido participar como colaborador en otros formatos de radio como ‘Estamos de cine’ (Castilla-La Mancha Media) y ‘El faro’ (Cadena SER), además de haberle convertido en una de las voces principales de los vídeos de FOTOGRAMAS.
