La alcaldesa de Ripoll (Girona) y líder de Aliança Catalana, Sílvia Orriols, se someterá a una cuestión de confianza después de que la oposición en bloque tumbase anoche su propuesta de Presupuestos para 2025.
La dirigente independentista de extrema derecha comunicó que empleará este mecanismo para poder sacar adelante las cuentas públicas. Si no la supera en el Pleno extraordinario de este jueves, como es previsible, la oposición tendrá 30 días para articular una mayoría que permita proclamar un nuevo alcalde mediante una moción de censura.
«Alea iacta est (la suerte esta echada, en latín)», publicó la también diputada en el Parlament en redes sociales tras la sesión plenaria del lunes. Junts (tres concejales), ERC (tres), PSC (dos), CUP (dos) y Som-hi Ripoll (uno) deberán unir fuerzas para dejar a Orriols sin el bastón de mando. Pese al intento de cordón sanitario tras las elecciones municipales de mayo de 2023, la oposición no logró aunarse para dejar sin la Alcaldía a Aliança Catalana, que logró seis ediles con el 30,8% de los votos de una localidad con cerca de 11.000 habitantes.
Tras hacerse con el Gobierno local que, desde el año 2011, estaba en manos de Jordi Munell (CiU y Junts), el partido impulsado por Orriols logró entrar por primera vez en el Parlament, en los comicios autonómicos del pasado mayo, con dos diputados (119.000 sufragios). Pese a no conseguir representación, en la provincia de Barcelona atrajo a más de 67.000 electores.
Es la segunda vez que la oposición tumba los Presupuestos del Ejecutivo municipal de Aliança, que el año pasado prorrogó las cuentas de 2023. Orriols, en cambio, ha decidido optar esta vez por la cuestión de confianza pese al riesgo de perder la vara de mando.
