Pedro Sánchez ha activado el botón de alarma ante la vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca con el apoyo del magnate Elon Musk. «La historia, si nos ha mostrado algo, es que las tecnologías no generan prosperidad por sí solas. De hecho tienden a reforzar el status quo, a dar más poder a los poderosos y hacer más ricos a los ricos. Y, por tanto, esta amenaza es especialmente grave en un contexto como el actual», ha expuesto el presidente del Gobierno en un mensaje velado sin mención explícita a EEUU.
Durante su participación este lunes en la clausura del acto HispanIA: cómo la inteligencia artificial mejorará nuestro futuro en la sede de la Fundación Ramón Areces en Madrid, Sánchez ha abundado en que «en esta semana que comenzamos estamos viendo cómo la tecnocasta, si me permiten que utilice esa expresión de Silicon Valley, está tratando de usar su poder omnímodo sobre las redes sociales para controlar el debate público y, por tanto, la acción gubernamental nada más y nada menos que de todo Occidente».
«Y en esto quiero ser claro y escueto, lo voy a decir en menos de 280 caracteres: la democracia no es un euro un voto; no es un tuit un voto; es una persona un voto. Por lo tanto, Europa debe plantar cara a esta amenaza y defender la democracia», ha subrayado el presidente del Gobierno. «Ante esto tenemos que revelarnos y plantear sobre todo alternativas», ha agregado.
Durante su intervención, Sánchez ha anunciado que el Ejecutivo va a movilizar 150 millones de euros para potenciar la integración y uso de la Inteligencia Artificial (IA) en las compañías españoles. De ellos, 20 millones serán para financiar 500 proyectos en pequeñas y medianas empresas para «hacer de ellas un ecosistema más innovador y competitivo».
«Estamos ante una de las tecnologías más transformadoras y disruptivas de la historia. Pero la IA no va a revolucionar el mundo por sí misma. Lo que lo va a revolucionar es como quieran otros o como queremos nosotros, ésa es la clave: respetando las leyes y los derechos de los ciudadanos o condenando los principios de nuestro estado democrático, sirviendo a las personas o trabajando contra las personas», ha concluido.
